martes, 22 de septiembre de 2009

Sympathy for Mr. Vengeance, dirigida por Park Chan-wook

Ryu es un chico sordomudo que quiso estudiar arte. Pero tuvo que abandonar sus estudios para mantener a su hermana, quien está muy enferma del riñón y necesita un donador con urgencia para sobrevivir. Cuando la fábrica en la que trabaja se va a la quiebra, consigue juntar su liquidación y sus ahorros para llegar a la cifra de 10 millones de wons, que es lo que costaría el transplante. Sin embargo, Ryu no es un donador compatible con el tipo de sangre de su hermana. Desesperado, intenta por todos los medios conseguir un donador para ayudar a su hermana. Y llega incluso al extremo de acudir al mercado negro con una familia de traficantes de órganos para conseguirlo, todo a cambio de uno de sus propios riñones y los 10 millones de wons ahorrados. Sin embargo, cuando despierta después de la extracción, aparece desnudo y abandonado en un edificio a medio construir, sin su riñón, sin el dinero y sin el órgano que habría de salvar la vida de su hermana.

Poco después le comunican del hospital que finalmente tienen un donador compatible, y por tanto, sólo hay que pagar los 10 millones de wons para efectuar el transplante lo antes posible. Entonces su novia Yeong-mi (quien al parecer está metida en un grupo subversivo) lo convence de secuestrar a la hija del dueño de la fábrica en la que trabajaba para conseguir el dinero, arguyendo que para él ese dinero no significa nada, mientras que para ellos es la vida o la muerte. Y todo sale a pedir de boca: Yu-sun es tratada como una huésped y ni siquiera se da cuenta de que ha sido secuestrada, el padre da el dinero y Ryu regresa feliz a casa para avisar a su hermana que todo está listo para el transplante. Sin embargo, ella se ha adelantado y se corta las venas en la bañera, porque considera que no vale la pena secuestrar a una niña inocente para salvar su vida. Y así, mientras un abatido Ryu está enterrando el cadáver de su hermana a la orilla del río en el que solían jugar en su infancia, Yu-sun cae al agua cuando iba en su búsqueda y se ahoga sin que Ryu se dé cuenta.

Horas después, Park Dong-jin, el padre de Yu-sun acude al río junto con la policía. Muestra claros signos de trastorno ante la tragedia y decide vengarse de quien resulte responsable de la muerte de su hija. Mientras tanto, Ryu, ayudado por Yeong-mi, encuentra la pista de los traficantes de órganos, contra quienes emprenderá su propia venganza, porque los seguirá hasta su propio apartamento, y los matará uno a uno, no sin antes recuperar su riñón robado. Park ha investigado la identidad de los secuestradores de su hija y hace una visita al departamento que comparten Yeong-mi y Ryu, y al no encontrar a éste último, interroga a Yeong-mi sobre su paradero utilizando generosos métodos de tortura. Ella le pide perdón por la muerte de Yu-sun, diciéndole que todo había sido un accidente, y al mismo tiempo le advierte que si ella muere, el propio Park no estará mucho tiempo entre los vivos, ya que ha dado su fotografía a los integrantes del grupo subversivo del que ella forma parte. Park, sin creer demasiado en las amenazas de la chica, la mata con una buena dosis de choques eléctricos. Cuando Ryu regresa al apartamento, se encuentra con que la policía está sacando el cuerpo de su novia, y entonces, aplastado por el dolor, jura vengarse del asesino.

Es así que Park y Ryu emprenden una mutua búsqueda furiosa. Y cuando parece que Ryu está a punto de liquidar a Park, dormido en su apartamento, cae en la trampa de éste al tocar la perilla de la puerta, cargada de electricidad, y queda inconsciente. Entonces Park lo golpea con lágrimas de furia y después lo lleva con las manos atadas al mismo río en que Yu-sun se ahogara. Lo arrastra río adentro, y allí reconoce que Ryu acaso no es un mal tipo, ya que todo lo había hecho para salvar a su hermana, pero aun así debe morir. Park se sumerge y le corta los tendones de Aquiles, con lo que Ryu se desangra y le es imposible mantenerse a flote. Park regresa a la orilla con el cadáver y lo hace pedazos para enterrarlo. Y cuando está cavando la tumba de Ryu, llegan unos tipos que lo rodean y lo cosen a puñaladas hasta que queda agonizante. Entonces uno de ellos le clava en el pecho una hoja con un mensaje en el que se identifican como el grupo subversivo del que le había hablado Yeong-mi mientras Park la torturaba.

Y allí quedará el cuerpo de Park, junto a su auto, los restos tasajeados de Ryu y el hoyo a medio hacer, en medio de la tranquilidad de un bosque y el melodioso sonido de las aguas del río…